El precio de los huevos en Estados Unidos ha alcanzado un récord, superando los valores de 2023 y afectando significativamente el presupuesto de los consumidores. Según los últimos índices de precios al consumo publicados el 12 de enero, una docena de huevos de categoría A alcanzó un precio promedio de 4.95 dólares en las ciudades estadounidenses, comparado con los 2.52 dólares de hace un año. Este incremento del 15.2 % en un mes contrasta con el aumento general del 0.4 % en los productos alimentarios.

El alza se debe principalmente a la gripe aviar, que ha impactado la producción de huevos en los últimos tres años. Entre octubre y diciembre del año pasado, las infecciones se cuadruplicaron, con más de 18 millones de aves afectadas en diciembre. A esto se suman desastres climáticos recientes, como huracanes en el sureste y los incendios en California, que han alterado las migraciones de aves silvestres, aumentando la propagación del virus y reduciendo la cantidad de gallinas ponedoras. La escasez resultante ha generado estanterías vacías en supermercados y un aumento en los precios.

Si bien el presidente Donald Trump ha centrado su agenda en reducir el costo de vida, no ha propuesto medidas específicas para frenar el alza de los huevos. Algunos analistas señalan que el problema también radica en la concentración del mercado: cinco empresas controlan entre el 36 % y el 40 % de las granjas de gallinas ponedoras, y han incrementado sus márgenes de ganancia hasta un 40 % en los últimos años, aprovechando la crisis sanitaria y la inflación. Mientras algunos ciudadanos piden más tiempo para evaluar la gestión de Trump, otros consideran que el fenómeno del «price gouging» o aumento especulativo de precios es un problema que aún no ha sido abordado.