La selección de Nigeria mostró un desempeño implacable en todas sus líneas y logró una ajustada victoria de 0-1 ante una valiente República Dominicana, gracias a un espectacular gol de Shakirat Moshood, en el partido de cierre de la fase de grupos del Mundial Femenil Sub-17, disputado en el Estadio Olímpico Félix Sánchez.

A pesar de la derrota, el equipo dominicano dejó todo en el campo, enfrentando a un rival que, aunque muy poderoso en sus ataques, no fue tan letal como se esperaba. «Hicimos el juego que nos propusimos, con mucho desgaste físico», expresó la entrenadora Betzaida Ubrí, quien destacó la labor sobresaliente de Renata Mercedes y Jaylene Rondón durante los noventa minutos de juego.

La selección quisqueyana intentó contrarrestar el compacto y agresivo ataque nigeriano, que siempre buscaba a la mediocampista de creación Taiwo Afolabi, imparable en cada avance por el centro del campo. «Hemos cumplido como selección, mostrando garras, trabajo y entrega», remarcó Ubrí, resaltando el temple y compromiso de sus jugadoras.

A pesar de los constantes embates nigerianos, la defensa dominicana, con una actuación heroica de cada integrante, logró evitar una goleada. «Esta selección estuvo a la altura de las exigencias y circunstancias», afirmó Ubrí, convencida de que su equipo pudo haber hecho más frente a un rival de tal envergadura.

Aunque la República Dominicana cedió el 59% de la posesión del balón a las africanas, se defendió con determinación durante la primera mitad, contrarrestando las peligrosas incursiones de Afolabi y la goleadora Moshood. La defensa dominicana, con figuras destacadas como Mercedes, la portera Rondón, Alexa Castro y Livia de León, se convirtió en un muro frente a las pentacampeonas africanas.

El equipo tricolor tuvo una clara oportunidad de gol en el minuto 35, cuando Castro recogió un balón suelto en el borde del área, pero su disparo se fue desviado cerca del palo. Nigeria continuó atacando sin cesar, llevando la presión al límite al final del primer tiempo.

En la segunda mitad, las nigerianas buscaron desesperadamente evitar un empate ante una República Dominicana inexperta pero combativa. A lo largo del encuentro, Nigeria disparó diez veces al arco, mientras que el equipo anfitrión solo logró un tiro.

El gol decisivo llegó en el minuto 89, cuando Moshood, desde fuera del área, disparó un misil al ángulo superior derecho, sin que Rondón pudiera hacer nada para detenerlo.

A pesar de la derrota, República Dominicana mostró gran estoicismo ante una de las selecciones más fuertes del continente, que terminó en tercer lugar en el Mundial anterior. La anfitriona se marcha con un valioso punto y un gol, conseguido ante Nueva Zelanda, como parte de su experiencia en el torneo.