La Copa Libertadores, el torneo de fútbol más prestigioso de América del Sur, ha comenzado una nueva edición y uno de los equipos más laureados, Peñarol, se prepara para debutar en el Grupo G. Con cinco títulos en su haber, el club uruguayo se enfrentará a Rosario Central en el Gigante de Arroyito este jueves.

Sin embargo, la emoción del torneo se ve eclipsada por la ola de violencia que afecta a la ciudad de Rosario desde hace años. Ante este escenario, la dirigencia de Peñarol emitió un comunicado en el que advierte a los fanáticos sobre los riesgos y les insta a tomar precauciones adicionales durante su visita a la provincia de Santa Fe.

«Peñarol recomienda a todos aquellos que hayan decidido viajar a alentar al Club que tomen todas las precauciones necesarias para hacerlo, considerando la coyuntura de público conocimiento que atraviesa la ciudad de Rosario, para que puedan vivir la experiencia con la mayor seguridad posible», se lee en el comunicado publicado en las redes sociales del club charrúa.

Además de advertir a los aficionados sobre la situación, el club uruguayo también ha tomado medidas para garantizar su seguridad. Se insta a los fanáticos a transitar en grupos y se ha establecido un punto de encuentro para todos los seguidores de Peñarol antes del traslado al estadio.

En un esfuerzo por mantener a los hinchas organizados y seguros, Peñarol ha decidido acompañar a un grupo de fanáticos y establecer un punto de encuentro en el Camping «Complejo Sindicato de la Carne ‘Beto Fantini'», ubicado a 70 km del peaje Rosario-Victoria.

Este punto de encuentro no solo servirá como lugar de reunión, sino que también ofrecerá servicios básicos, incluyendo quinchos, baños y opciones de comida. Los micros que transportarán a los fanáticos llegarán al lugar a las 13 horas del jueves.

El operativo de ingreso al estadio estará a cargo de la Policía de Rosario, y se espera que los hinchas de Peñarol puedan ingresar al Gigante de Arroyito a las 15 horas. Se ha especificado que solo se permitirán ciertos elementos como mochilas, carteras y banderas de ciertas dimensiones, mientras que otros artículos estarán prohibidos.

Con estas medidas, Peñarol busca garantizar la seguridad y el bienestar de sus seguidores durante su participación en la Copa Libertadores, a pesar de los desafíos que enfrenta la ciudad anfitriona del encuentro.