Un devastador accidente aéreo ha sacudido la ciudad de Omdurman, en Sudán, con un saldo trágico de al menos 46 personas fallecidas. Un avión militar Antonov se estrelló el martes en un distrito densamente poblado, convirtiéndose en uno de los accidentes aéreos más mortales en el país en las últimas dos décadas.
El avión, que había despegado de la base aérea de Wadi Sayidna, al norte de Omdurman, se precipitó a tierra en el distrito de Karrari, causando daños significativos a varias viviendas. Además de los fallecidos, se reportaron al menos 10 heridos, según la Oficina de Medios de Jartum.
Las autoridades aún no han determinado la causa exacta del accidente, pero se sabe que a bordo del avión viajaban tanto militares como civiles. Según informes de la prensa local, se sospecha que entre los pasajeros se encontraban militares de alto rango, aunque esta información no ha sido confirmada oficialmente por el ejército.
Este trágico incidente pone de manifiesto el deficiente historial de seguridad aérea de Sudán, donde los accidentes de este tipo son relativamente frecuentes. En 2020, un avión militar Antonov An-12 se estrelló en la región de Darfur, causando la muerte de 16 personas. Además, en 2003, un avión de Sudan Airways se estrelló contra una colina, resultando en la muerte de 116 personas.
El accidente aéreo ocurre en un contexto de guerra civil en Sudán, que ha estado en curso desde 2023. Los combates entre el ejército y el grupo paramilitar Fuerzas de Apoyo Rápido (FAR) han causado estragos en el país, con informes de atrocidades y violaciones de derechos humanos.
La situación en Sudán sigue siendo tensa y volátil, con combates en curso en varias partes del país. La comunidad internacional ha expresado su preocupación por la escalada de violencia y ha instado a las partes en conflicto a buscar una solución pacífica.
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