Emilio Bonifacio, capitán de los Tigres del Licey, se ha consolidado como una de las figuras más emblemáticas en la historia del equipo. Con su estilo de juego agresivo, velocidad en las bases y un bateo oportuno, Bonifacio ha capturado el corazón de la afición y el respeto de toda la liga.

Conocido por su habilidad para ejecutar triples de manera natural, su impecable defensa en los jardines y su liderazgo dentro y fuera del terreno, Bonifacio se ha ganado un lugar especial en el panteón de leyendas del béisbol dominicano. Su compromiso con los bicampeones del Licey es evidente en cada jugada, donde deja todo en el terreno por el triunfo del equipo.

Los aficionados celebran cada actuación del capitán, quien a lo largo de su trayectoria ha demostrado ser un jugador completo y un ejemplo a seguir para las nuevas generaciones. Su carisma y entrega no solo lo convierten en un ídolo dentro de las líneas de cal, sino también en un referente del espíritu competitivo que define a los Tigres del Licey. Un verdadero «genio» del juego, Bonifacio sigue dejando huella como eterno guardian del prado central y derecho, reafirmando su lugar como un líder indiscutible en el terreno de juego.