La doctora Jacqueline Miranda Pereyra, exesposa de Roque Espaillat, conocido como «El Cobrador», junto a su hijo Luis Alejandro Espaillat Miranda, han solicitado a la justicia que detenga la violencia psicológica y las campañas de descrédito en su contra, enfatizando que solo buscan paz y tranquilidad.
Ambos han informado que están delegando a sus abogados, José Lorenzo Fermín M. y César Leonardo Reyes C., para que tomen acciones judiciales contra pseudo comunicadores que, desde sus programas en YouTube, han llevado a cabo una abusiva e ilegal campaña de intimidación, persecución y descrédito en su contra.
A través de sus abogados, destacaron que el miércoles se filtró a la prensa una grabación realizada libremente por Luis Alejandro sobre un caso judicial de 2008 y 2009, y sobre una querella reciente presentada por Jacqueline contra Roque Espaillat ante la Unidad de Atención y Persecución de la Violencia de Género, Intrafamiliar y Delitos Sexuales de la Procuraduría Fiscal de Santiago.
En un comunicado, resaltaron que ante el anuncio público de la próxima divulgación de esta grabación, Luis Alejandro, a través de sus abogados, notificó formalmente su oposición a su divulgación. Sin embargo, los responsables ignoraron esta oposición y reprodujeron el vídeo.
La madre y el hijo expresaron su rechazo a la divulgación de esta información, destinada exclusivamente para la fiscal encargada de dichos casos. Solicitan su retiro voluntario, advirtiendo que de no ser así, recurrirán a las instancias judiciales correspondientes.
Informaron también que el martes, la fiscal apoderada de la querella convocó a las partes para conocer estos hechos. Durante la comparecencia, Roque Espaillat fue advertido de abstenerse de cualquier acto de hostigamiento e intimidación.
“Se advierte al señor Roque Espaillat que debe mantener el respeto, abstenerse de molestar, intimidar, asediar, hostigar o amenazar, perseguir, agredir verbal, emocional o psicológicamente, ya sea en persona o a través de las redes sociales o medios de comunicación a la señora Jacqueline Amalia Miranda Pereyra”, decía la advertencia.
A pesar de esto, al día siguiente, Roque y su equipo de comunicación publicaron falsamente que había ganado el proceso. En el comunicado, Jacqueline y Luis Alejandro dejaron claro que no desean que estos casos se ventilen públicamente debido a su naturaleza privada y la instancia judicial correspondiente. Sin embargo, se reservan el derecho de hacerlo si Roque Espaillat o sus asociados continúan dañándolos en los medios de comunicación.
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