El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, afirmó en una entrevista que el asalto en Rafah, ciudad sureña de Gaza, «está por terminar», aunque las operaciones militares en Gaza continuarán hasta acabar con Hamás. En paralelo, el ministro de Defensa de Israel, Yoav Gallant, ha llegado a Washington para discutir la próxima fase de la ofensiva en Gaza, en medio de crecientes tensiones con Hezbolá en la frontera con Líbano.

Desde el sábado, circula en redes sociales un video que muestra a un hombre herido, identificado como el palestino Mujahed Azmi, atado al capó de un carro militar israelí durante una incursión en Yenín, Cisjordania, verificado por Al Jazeera.

En su primera entrevista desde el 7 de octubre, Netanyahu detalló los planes a corto plazo del ejército, indicando que la fase de «intensos combates contra Hamás» en Rafah, un foco del desplazamiento interno en Gaza, terminará «muy pronto», sin especificar una fecha.

«Una vez terminada la fase intensa, tendremos la posibilidad de desplazar parte de las fuerzas hacia el norte, primero con fines defensivos y luego para llevar a nuestros residentes evacuados a casa», declaró Netanyahu en el Canal 14 israelí. También mencionó que algunas tropas se dirigirán hacia la frontera con Líbano para intensificar la ofensiva contra Hezbolá.

Netanyahu dejó claro que la ofensiva en Gaza no terminará hasta que Hamás sea eliminado, rechazando dejar a la Autoridad Nacional Palestina a cargo de Gaza y priorizando el regreso de los rehenes bajo el control de Hamás, por vía diplomática o «de otra manera».